El ultrafondista egarense recorre los 836km y 49.900m de desnivel positivo de la Alta Ruta Pirenaica en 15 días y 4 horas, emulando así al mítico montañero francés Georges Véron. «Que bonito es el Pirineo», fueron las primeras palabras a su llegada ayer a la costa de Banyuls-sur-Mer tras cruzar el Pirineo de punta a punta.

L’Alta Ruta Pirenaica traza un recorrido de 836km uniendo el Atlántico con el mar Mediterráneo

Historia de la Alta Ruta Pirenaica (ARP)

La Alta Ruta Pirenaica (ARP), o Haute Randonée Pyrénéenne (HRP) en francés, nace en 1968 por el francés Georges Véron. Aunque la idea de unir el Atlántico con el Mediterráneo atravesando los Pirineos no fue suya. La primera travesía que se tiene noticia nos lleva a 1817, cuando el francés Fréderic Parrot la realizara con la intención de medir el nivel entre los dos mares.

La Alta Ruta Pirenaica, como Verón describe en su libro, discurre en su mayor parte por la vertiente norte y pasa a España cuando le obliga el relieve y la falta de equipamiento de la vertiente francesa no lo permite. El trazado original comienza en las playas de Hendaya y termina en Banyuls, donde la escasa señalización, su longitud y el exigente desnivel lo convierten en un auténtico reto.

La aventura de Oriol Antolí

Y en autosuficiencia y sin ayuda externa aún más. «Una tienda de campaña de 700gr, un aislante y un saco ligero» ha sido el modus vivendi de Oriol Antolí durante quince días. «Hacerlo de manera autosuficiente es duro pero su vez muy satisfactorio. Había días que sólo comía barritas y frutos secos y otros engullía en algún restaurante del camino», relata.

La meteorología también ha tenido un papel fundamental en la travesía: «Durante los primeros días me llovió sin cesar y con mucha niebla, lo que dificultaba la progresión. Ya en territorio catalán me enganchó tormenta cerca del refugio de Certascan, seguida por una intensa nevada que lo dejó todo impracticable. Progresar a través de la nieve me hizo ralentizar el paso y estuve a punto de abandonar».

La Alta Ruta Pirenaica tiene la particularidad de que no está marcada como tal y hay que tener nociones de orientación y saber manejarse con sistema GPS: «Para ir con seguridad, navegaba con dos alternativas: con el track de otro chico que había realizado la ruta, Matthias Hekman, y también los mapas de Topo Pirineos en la que está colgados los tracks de la ARP. Sin embargo he ido haciendo variaciones sobre el terreno, bien por caminos que habían desaparecido o estaban cerrados».

La ruta también presenta muchas alternativas al trazado original de Véron. «De Arremoulit hasta Wallon hice la variante más técnica y larga, con 2.500m de desnivel positivo que me llevaron 8 horas. La nieve me impidió subir a la cima del Carlit, así que tuve que atravesar por el collado de la Grava para llegar a Las Bulloses. Tampoco subí al Certascan por la tormenta».

Éxito con posible récord

Según Fastest Known Time, página web especializada en registrar récords de retos de este tipo, sólo tres personas habrían realizado con éxito esta travesía. Aunque el trazado puede presentar muchas variantes, el récord lo tendría el francés Guillaume Arthus en 13 días, 23 horas y 38 minutos con una distancia aproximada de 800km y 43.000m positivos, medida un tanto por debajo que Antolí. De todos modos, Antolí sería el primero en realizar la travesía de manera autosuficiente.

El éxito de Antolí no sólo ha sido deportivo. En todos sus retos alrededor del mundo sigue luciendo la bandera de la entidad Prodis (Pro-Discapacitados Fundación Privada Terrassenca), destinada a la asistencia y la promoción integral de adultos con discapacidad intelectual, enfermedad mental o parálisis cerebral .

Muchas son las líneas que hemos escrito en Ultres Catalunya sobre las peripecias de Oriol Antolí alrededor del mundo, curtido en pruebas de ultrafondo extremas como Monarch’s Way Ultra de 1000km, Goldsteig Ultra Race de 661km o Wibolt de 555km. Ya podemos añadir otra.

Fotografías © Oriol Antolí